domingo, abril 22, 2007


Sunshine (de Danny Boyle)

Sunshine me parece una película de notable alto. Llegué a ella por un trailer que supo picar mi curiosidad y porque Boyle y su cine, de culto, me ha dado más grandes momentos que tristes decepciones (sírvase de ejemplo su anterior "Millions": una película toda dulzura).
Primeramente me parece una sabia elección de actores con un trabajo (todos) más que digno (Rose Byrne - a la que vemos en la foto - y Cillian Murphy llevan el peso y bien llevado); Boyle continua trabajando con Alex Garland como guionista (28 días después y La playa) del cual me parece que tiene en ambas momentos brillantes pero que en este citado doblete se le escapa la faena de las manos y pierde el norte hacia tierra de nadie. Pero es con Sunshine donde mi satisfacción llega y él cumple.
La trama: El sol se apaga, así, en un último intento de salvar la Humanidad, una tripulación de 8 tripulantes disponen de una carga nuclear para reactivar la estrella y nuestras vidas.
Lo mejor: La sala de exposición de la nave; la ansiedad que trasmite Boyle con sus imágenes (me agarré a la butaca desesperado) y la belleza de las mismas; el trasfondo filosófico y humanista del guión; que alguien rodara de una vez una película de ciencia ficción de calidad.
Lo peor: Ir al cine en Domingo -creo que por última vez-; ¿por qué siempre son 8 tripulantes?; ¿por qué hay tan pocos genios en el cine actual?

jueves, abril 19, 2007


Cyrano de Bergerac (de Edmond Rostand) Teatro

Cyrano es una prosa hermosa de un loco enamorado,
que a todos embeleza con palabras y con acero calla,
héroe valiente y locuaz, de gran nariz acomplejado,
que por amor puro sacrifica la vida hasta el más allá.
¿Puede la historia ser más hermosa?
Da vida ver vida y sentir entre butacas, mientras las frases vuelan y hieren, o ¡qué diantres! algo toca dentro que todo lo desarma.
Da vida ver vida fresca y real, a viva voz hiriente frente a tus ojos, donde la mentira no tiene cabida jamás, ni se le ocurriese.
Lo mejor: La obra, toda ella; que en su primera representación en el siglo XIX cuentan que aplaurieron durante veinte minutos seguidos: ¡como debe ser!
Lo peor: Un teatro medio vacío; preocuparme por ello por la cultura española.

domingo, abril 15, 2007


Accepted (de Steve Pink)

Cuando seamos más viejos nos dará por películas del oeste (Wayne y Clint), no me digas el porqué, pero es una ley con peso que se cumple a rajatabla.
Ahora, he cambiado la placa de sheriff, por el carnet de institutos y universidades, quizás porque estoy menos violento y prefiero los electroencefalogramas planos a los tiros... y porque, de verdad, echo de menos a "Porkys" y a "los Albóndigas". A otros les da por vete a saber.
Admitido nos cuenta a un grupo de jóvenes que, por suerte o por desgracia, no son admitidos en ninguna universidad y... (no me gusta mucho chafar las pelis).
La película tiene a Justin Long como actor principal, una versión mala de Michael J. Fox, que no me convence y que encima veremos en la Die Hard 4.0 (¿en qué papel?) pero la peli, sin embargo, es resultona.
Lo mejor: Su habitación en la universidad; los paliques del director que fichan para la universidad.
Lo peor: La realidad donde hice mis estudios.
Puntuación 6

sábado, abril 14, 2007


Mentes en blanco (de Simon Brand)

Sólo me bastó ver el empezar al estilo Saw, pero descafeinado, para saber que era una pérdida de tiempo, que las ideas se agotan y que el plagio es el pan de cada día.
Mentes en blanco es desperdiciar la vida que inviertes en un libro, en dar un paseo, en ver un atardecer, en zamparte un paquete de papafritas o en rascarte la panza.
Es una película que no aporta sino que resta. Resta ilusión, que es lo peor que hay en esta vida.
Cinco tíos se despiertan en una sala sin recordar absolutamente nada de su pasado... esa es la trama, pero te aseguro que es mejor jugar al quien es quien.
Lo mejor: El ahorro económico de verla en dvd y en pijama en casa.
Lo peor: Lo aburrida que resulta y ser tontos por caer en su trampa; de los actores ni hablo porque hago un destrozo = ahora si me creo que por cada pelí buena hacen tres o cuatro mierdas.
Puntuación: 3.5

Hannibal Rising - El origen del mal
(de Thomas Harris)
Libro


No me leí en su época El silencio de los corderos, pero disfruté la película como todo hijo de vecino con aquel Hannibal colosal que se comía la pantalla y lo que le dejasen, con un Hopkins que había captado la esencia del personaje como propia dando un resultado escalofriante y soberbio.
Así Hannibal marcó un punto de inflexión en ese tipo de cine y los asesinos en serie llenaron la gran pantalla a cada cual más enrevesado, a veces con acierto y otras veces siendo sólo burradas macabras.
Me imagino que a Thomas Harris no le quedó otra para escapar a la presión de su editor, de sus fans enfervorizados... y también para escapar a sus más profundos miedos.
Hannibal, la secuela, fue un buen libro (no así su película - quizás el peldaño de su predecesora estaba demasiado alto) con un Hannibal igual de sanguinario y exquisito. Me gustó el estilo desenfadado y fácil de Harris, entendí un poco más el personaje de Hannibal y me desconecté del mundo en aquellas tardes entre siesta y siesta.
Años después tenemos otra ración. Las críticas de la cinta daban bastante leña así que me decanté por las letras. Sin embargo, el libro es más de lo mismo con una trama muy similar a la anterior. Se lee muy fácil, te distrae lo justo pero es un poco bobalicón.
Aunque estoy seguro que Harris y todo su tinglado están ganando pasta al respecto, yo le aconsejaría dar un volantazo a la derecha y dejar esta carretera de una vez por todas.
Lo mejor: Las brochetas de mejillas; lo exquisito que es Hannibal y que sólo un libro te permite saborear los tremendos detalles.
Lo peor: No necesitábamos saber el porqué... aunque siempre haya alguno. O unos miles.
Puntuación: 5.5

Shooter (de Antoine Fuqua)

Shooter pertenece a la gama de películas de segunda fila, es decir, lo que esperas es lo que ves. Y no hay nada nuevo ni lo pretende.
Tiene todos los ingredientes para entretener: acción, disparos, chico cachas, tías guapas, malos, buenos y traidores. Todo eso en la batidora y con una correcta técnica da un producto que te digo que entretiene. Y encima a mi me acabó recordando a las películas aquellas de los 80 estilo Commando y Acorralado.
Lo mejor: El tema de los francotiradores desde siempre es atractivo aunque me parece que no lo explotaron demasiado; Wahlbert está bien; descubro a Kara Mara que puede ser una joven con futuro.
Lo peor: El final es largo, largo como los fines de mes; Danny Glover y su equipo de malos lo hacen de verdadera pena (¿no hay una renovación generacional ya?).
Puntuación: 5.5.

miércoles, abril 04, 2007

Ladrones de sombras


De vez en cuando es preciso alejarse de uno mismo para ver su propia sombra. Es, a mi modo de ver, un ejercicio práctico y limpio. Y también inteligente. Y puro.
Pero, de pronto, sin motivo alguno me perdí en el camino sin fuerzas ni ganas, herido, hundido, siempre a medio gas...
Y lo cierto es que estuve así durante meses, meses donde no salía ni una caprichosa letra (éstas que ahora cuestan lo suyo cuando antes aleteaban en mis dedos), meses donde no era yo (y lejos de aceptarlo, apartaba el enunciado como los puntos y aparte), donde el corazón era negro como mi pensar, donde más que un lado oscuro era un universo... Eran meses sin mi sombra, sin saber qué demonios era.
Y a día de hoy, aunque aún no estoy en paz, más bien estoy en guerra, la savia es nueva y bruta y las fuerzas han salido a flote de un escondido bote. Así que las cosas pintan bonitas y tiernas porque vuelvo a proyectar en el suelo esbozos de lo que fui: cuchillo en boca, cinismo por doquier y las cartas abiertas en abanico, cargadas de todo y de nada, como por el mismísimo diablo... Así que, ladrones de sombras, ¿quién mueve ficha ahora?