Halloween

Nadie tiene la culpa de mi enfado con el mundo, pero, a estas alturas, debo tener una úlcera de caballo. Careta sobre careta. Cinismo sobre cinismo.
Resulta que el 31 de Octubre es la noche de brujas. Es esa noche mágica donde los niños inocentes tocan a tu puerta, y te ofertan un angelical "truco o trato", si aceptas deberás dar una sana recompensa, sino te endosarán una pequeña broma. Hasta ahí vale, a los niños todo se les perdona.
Pero, quieto parado, que llegan los adultos en su esperada "la noche de las pintas vivientes" (slogan real eh), se ponen un disfraz que de miedo (puede ser cualquiera) y se encaminan a ponerse ciegos hasta que les de el sol (que los desintegrará para siempre) si antes no han echado la suficiente bilis para morir retorcidos en los jardines de tu ciudad.
Stop. No sigo.
Os dejo este tema que me encanta y refleja un poco todo esto que digo con otras palabras. Se salen.
Este mundo loco...