Spiderman 3 (una película de Sam Raimi)

Llevo mucho más de un tercio de mi vida entre telarañas. Un hecho casual, como casi todos, quiso que así fuera. Y me convertí en un lector de cómics. Un fiel lector de cómics. Y no me arrepiento, ni mi bolsillo tampoco.
De ahí puede venir mi enfado (o desilusión) porque el titular claro es: Raimi suspende en Spiderman 3 (muy a mi pesar).
Tampoco es para tanto digo yo porque ya me lo esperaba, o más bien, lo supe desde que vi la primera imagen.
La película es cansina, larga, aburrida y falta de todo. Las alusiones al cómics son ridículas y el metraje no deja de ser un envite comercial que a buen seguro gana.
Lo mejor: Bruce Campell, actor fetiche de Raimi que vuelve a salirse en 3 minutos; Tobey Maguire y su capacidad para encarnar el lado oscuro; Thomas Haden clava al hombre arena; J. J. Jameson trae unas risas también.
Lo peor: Gwen es un insulto grave y su actriz no pega ni con cola de caballo; el guión es patético; la cinta es espesa y la tira de larga en un sinsentido; que Raimi siga en esto metido.
Puntuación: 4.9 (porque algunas cosas no se pueden aprobar a la ligera).