Nacha Pop (Concierto)

Tenía que llegar el día en el que alguien rozara la perfección de una vez por todas. Y ni me esperaba que fuera en ese concierto, ni me esperaba que fuera en esa canción, ni me esperaba nada de nada. Simplemente llegó. Y la verdad es que me cogió tan indefenso que, con la piel erizada y los ojos acuosos, sólo pude levantarme del asiento y aplaudir con todas mis fuerzas.
Antonio Vega no está físicamente bien, eso canta a los cuatro vientos; tampoco me interesa lo más mínimo el morbo de si tiene esto o lo otro. De lo que estoy orgulloso es de poder contar la experiencia de que un día vi un genio en vida, un talento sobrenatural del pop español (¿tiene que morirse para poder decirlo?), alguien con la valentía de mostrar su sensibilidad hasta un punto donde sólo los valientes y unos pocos son capaces.
Lo mejor: Suenan de fábula; el color de la voz de Antonio.
Lo peor: Era martes y el aforo a la mitad.

Esta fue la canción con la que Antonio nos llevó fuera del planeta Tierra: Lucha de Gigantes.