The Reapers - a.k.a - Los hombres de la Guadaña
Un libro de John Connolly

Boyero por primera vez en su vida lo clava: "Uno de los escritores actuales de novela negra que me provocan insomnio la noche anterior a que se publique su última entrega".
No miento, algo se paraliza en mi cuando leo a Connolly. Y quiero pensar que es el mundo, un mundo que hay entre él y yo, solos, esgrimista contra esgrimista a sable, espada o florete.
Allí dentro, en ese gris universo, minúsculo, indefenso y aterrado me muevo a su merced, pasando páginas con la delicadeza de quien toca el arpa, y con la sensación de un miedo atroz, de que algo no va bien de alguna de las maneras, de que en breve saldrá por algún resquicio algún sonido, propio de arañar el frío metal, que me hará soltar un alarido por la boca, y que, por supuesto, después no saldré airoso ni en la mejor de mis suertes.
Connolly es grande, imprevisible, meticuloso... Si quieres gritar te coserá la boca y si quieres huir hará más grande el tupido bosque. Siempre sin elección.
The Reapers es la jugada maestra de ampliar la saga del detective Charlie Parker, centrada ahora en sus dos amigos Louis y Ángel, por llamarlos así, ésta vez en apuros por un asunto del turbio pasado cuando Louis fue encontrado para ser el último hombre de la Guadaña.
Personalmente, esta novela quizás es necesaria, y Connolly no ha perdido esa manera suya de hilvanar, de tejer, de construir su colmena... y sabes, tienes más datos de porqués, de cómos y de cuándos... pero yo cada dos años a lo sumo debo saber algo de Charlie Parker... Me lo pide el cuerpo. Y estamos de sequía y yo con hambre. ¿Dónde estás Charlie Parker?

Lo mejor: Cómo lo cuenta y cómo te lleva, los personajes ya son de la familia.
Lo peor: 20 euros me sale esta ansiedad; si no tienes idea de qué va ésto es mejor que no lo intentes por este libro.

Puntuación Gambitoking: A día de hoy es imposible que Connolly tenga menos de un siete.