jueves, noviembre 01, 2007


El asesinato de Jesse James por el cobarde de Robert Ford (una película de Andrew Dominik)

Definiré la película como un western atípico, como poesía pura en movimiento, como algo absolutamente maravilloso, porque su esencia es alma y corazón a cada fotograma que pasa, porque es de un nivel interpretativo escalofriante (de lujo) y porque este cine escasea, así que cuando lo tienes delante ni te lo crees ni pestañeas.
Ahora mientras sentado escribo aún estoy emocionado y es que esta película casi colma todos los detalles que ansío. ¡Qué cosas despierta el cine en uno! ¡Qué bien me siento! ¡Qué hermoso espectáculo!
Parece insultante que una película de este calibre no tenga el respeto que merece. ¿El premio al mejor actor en la Mostra de Venecia? ¿Sólo? Vale, esta película es atípica y yo soy atípico, de verdad que me vale. Y si estoy loco, pues estoy loco.
Las palabras serán pocas en esta ocasión para rendir homenaje al trabajo de Pitt, haciendo su personaje profundo y suyo, al trabajo también de Casey Affleck: impresionante, a todo el reparto que brilla sin parar, al precioso vestuario, a toda la magnífica ambientación, a la música, a la soberbia fotografía, a lo bien contada que está...
Lo mejor: Para mí es excelente y es la suma de los detalles lo que la hace grandiosa.
Lo peor: No tener ya el libro en que esta basada en mi poder; sus dos horas y cuarenta minutos para mi fueron una delicia no una maldición.
Nueve o diez porque para mí es épica e indispensable.
(Probablemente es obligatorio un segundo visionado en cine)

1 comentario:

Maladroit dijo...

un 10 en filmaffinity!!!!!!!!
¿habías puesto alguno?

En fin habrá q verla;)