EEG plano

No sería honesto por mi parte no admitir que me he comido ciertas manzanas, mandarinas y rosquetes algo podridos en los últimos meses en los que he recordado el número de socio del videoclub de toda la vida. Nadie es ni será nunca perfecto... sería todo muy aburrido.
Lo que cito a continuación (apiadaos de mi alma), por encima de todas las cosas, daña la salud con el riesgo irreversible de volverte imbécil para siempre porque te quita ("roba") tiempo y dinero. El que avisa no es traidor y hay cosas con las que no se juega (además de con la pilila). Tendré piedad porque esta acidez no se va con protectores gástricos:
Matrimonio Compulsivo (una película de los hermanos Farrelly). Año 2007. 115 minutos.
Los hermanos Farrelly desde "Algo pasa con Mary" (de 1998... ya ha llovido) no han hecho nada decente. Personalmente me niego a ver nada más de ellos. Una atrocidad.
Los cuatro fantásticos y Silver Surfer (una película de Tim Story). Año 2007. 95 minutos.
La primera era mala con ganas. Bien, ésta es peor. Decir más daña el intelecto, a un nivel más profundo y menos recuperable. No es óptima ni para carga o descarga.
Ellas y ellos (una película de Bart Freundlich). Año 2005. 103 minutos.
Una tontería como otra cualquiera pero sin arte ni pretensiones donde nos ponen a caldo. Es como un pelo en la sopa... de hace una semana.
Una casa patas arriba (una película de Steve Carr). Año 2007. 92 minutos.
Dime Dios: ¿Por qué demonios me hiciste alquilar esto? ¿Qué influjo maligno se adueño de mí? Absolutamente detestable.
Shrek 3 (una película Chris Miller, Raman Hui). Año 2007. 92 minutos.
Ni una risa, ni nada del ingenio de las primeras dos partes. Una manera de que te quiten la cartera sin que te des cuenta. Creo que ni los niños la verán. No son estúpidos.

Bueno, dicho esto, ahora me puedo acostar con la conciencia tranquila del buen ciudadano.
Sed felices.